Capilla de San Juan Bautista de la ConcepciónImageComo de todos es sabido, el día 14 se celebró en nuestro pueblo la festividad de San Juan Bautista de la Concepción. Como curiosidad he de decir que dicha festividad ha caído en jueves, justamente igual que la fecha en que murió el Santo (14 de Febrero de 1.613), hace 395 años con la edad de 51, faltándole cuatro meses para cumplir los 52.

Este año ha sido una fiesta mas especial ya que, después de 6 años (divididos en varias etapas), se ha visto finalizada la restauración llevada a cabo en la Capilla, ubicada en lo que fue su casa natal. Esta fue inaugurada a mediados del siglo XIX (1.884).

El día 13 hemos inaugurado  las obras de restauración. Han sido unos actos muy emotivos a los cuales asistieron numerosas personas, entre ellas las Autoridades locales, nuestros párrocos D. Tomás y D. Leopoldo, Padre Antonio Provincial de los Trinitarios de España-Sur, Junta Directiva, Vecinos y asociados a la Hermandad. También estaban invitados el Padre Isidro Trinitario Director del Secretariado de Córdoba y nuestro paisano el Hermano Carmelita Fray Javier, los cuales, por motivos personales de última hora, no pudieron venir.

Se han vivido los meses anteriores a la inauguración con mucho entusiasmo por parte de la Junta Directiva y a la vez con preocupación, pues era mucho lo que faltaba por terminar y lo que había que organizar para que todos los actos salieran de la mejor forma posible.

No cabe duda que en todo momento ha estado el Santo acompañándonos.

Doy las gracias a los predicadores por la formación que hemos recibido durante los diez días con sus predicaciones. A todos los que han colaborado económicamente y a los que con su trabajo diario, sin remunerar, que ha sido de mucha utilidad y un gran apoyo en la consecución de estos proyectos.

Quiero decir, para terminar, que no debemos olvidar que pronto le tenemos que demostrar a San Juan de Ávila, el mismo entusiasmo que hemos tenido con San Juan Bautista.

Espero  que  sigáis  colaborando  como  hasta ahora, pues nuestros Santos se lo merecen.

                                                 Saludos