No hablamos ni vivimos «una memoria histórica»
Tomás Lozano Rivas2011-06-10T12:16:00+00:00
El día doce de Junio celebra la Iglesia la gran Fiesta de Pentecostés: la venida del Espíritu Santo sobre los apóstoles.
Este acontecimiento no es historia, sino presencia: El Espíritu del Señor es “el alma” de la Iglesia y el huésped invisible de cada creyente. “mora en vosotros y en vosotros está” (Jn 14,17)
“Cristo es el Dios encarnado. El Espíritu es Dios entrañado, Dios derramado en nuestras entrañas; como el un-güento que penetra, como el agua que se bebe, como el aliento que se respira”.
era Comunión porque por primera vez voy a recibir el Cuerpo de Cristo, será muy emocionante para mí, además estaré acompañado de otros niños y niñas.
En este mes de Junio celebramos la Fiesta de Pentecostés, fiesta que es realidad diaria en tantas personas creyentes. El Espíritu es el alma de la Iglesia y de nuestra vida cristiana:
“Del trigal que nos queda en la mirada
ce muchos años. Teresa me ha contagiado su propia vida, su manera de ver las cosas, hasta su mismo lenguaje. Ha sido una gracia encontrarme con ella.
Quiero esta vez contaros un pequeño relato en forma de carta íntima que, siendo fruto de mi imaginación y creatividad, puede ser pura casualidad que de manera parcial o incluso con mucha aproximación haya sucedido en más de una ocasión en algunas personas.
la mejor definición de Dios: “Dios es Amor”, nos dice.
