Un minuto solamente
Pilar Martínez Fernández2009-03-07T02:03:00+00:00
Un rato antes de escribir estas líneas, recibí en mi correo electrónico dos mensajes que resultaron ser bastante recurrentes para mis propósitos. Puede parecer en un principio que no tienen nada que ver el uno con el otro, pero, si leen hasta el final, encontrarán el nexo común e incluso algo más.
El primer mensaje que recibí y llamó mi atención, contenía un archivo titulado “Un minuto”. En él había imágenes y frases cuidadosamente sincronizadas con un mensaje implícito que decía lo siguiente: “Dicen que se precisa un minuto solamente para percibir una persona en particular. Una hora para valorizarla. Un día para apreciarla y amarla, pero...una vida entera para olvidarla.”
Un día de un mes de un año, mi mujer y yo nos desplazamos hasta Ciudad Real, en donde ella tiene familia. Llegábamos a las 13 horas, y lo primero que hicimos fue buscar el hotel en el que teníamos reservada habitación. Un policía local nos indicó que estaba dentro de una calle peatonal, al lado de la Plaza Mayor, y a la que podíamos acceder con el coche, siempre que fuésemos al establecimiento.