1.- No pagues tu mal humor con quien es ajeno a lo que te ocurre.
2.- Trata de comprender los defectos y las faltas de quienes no saben disimularlos porque, además, se parecen mucho a los de todos.
3.- Tratar a los demás, como quieras que los demás te traten a ti.
4.- No muestres las dificultades y problemas al que en nada puede ayudarte; si te quiere, le entristecerás; si te odia, se alegrará.
5.- Se puede ser un viejo jovial o un joven senil, todo depende de hacer queriendo hacer, o de obrar a regañadientes; no influye la edad.
6.- Cuida la puntualidad en las citas y trabajos, te dará fama de responsable.
7.- Detente después de dar tu opinión, sin llegar a la discusión; te habrá merecido la pena “el frenazo”.
8.- No quieras ser el único que habla, debes aprender a escuchar.
10.- Procura sonreír siempre que te sea posible.
11.- No prometas más allá de adonde puedas cumplir con tu palabra.
12.- Trata de pedir todo por favor, y no olvides decir: “Gracias”
El que más veces tiene que repetirse estos consejos, soy yo.