María-Isabel Molina Espinosa. Profesora del Colegio Maestro Ávila y Santa Teresa. Coordinadora del área de Religión en Secundaria.
Nieves Albuger Madrona. Profesora de Religión en el Colegio Juan de Ávila y en el Colegio de Villamayor de Calatrava.
Paquita Nevado García Minguillán. Profesora de Religión en el Colegio Virgen del Carmen.
Teresa Simarro Martín del Burgo. Directora y Coordinadora del área de Religión en Primaria del Colegio Maestro Ávila y Santa Teresa.
“Al llegar el día de Pentecostés, estaban todos reunidos con un mismo Objetivo. De repente vino del cielo un ruido como una impetuosa ráfaga de viento, que llenó toda la casa en la que se encontraban. Se les aparecieron unas lenguas como de fuego que se repartieron y se posaron sobre cada uno de ellos; se llenaron todos de Espíritu Santo y se pusieron a hablar en diversas lenguas, según el Espíritu les concedía expresarse.
Residían en Jerusalén hombres piadosos, venidos de todas las naciones que hay bajo el cielo. Al producirse aquel ruido la gente se congregó y se llenó de estupor, porque cada uno les oía hablar en su propia lengua. Estupefactos y admirados decían: “¿Es que no son galileos todos estos que están hablando? Pues ¿cómo cada uno de nosotros les oímos en nuestra propia lengua nativa?” ( Hech. 2.1-8)
Hemos invitado a las Profesoras de Religión de los distintos Centros de Enseñanza de Primaria y Secundaria y Bachillerato para que compartan con nosotros, lectores de la revista “Iglesia en Almodóvar”, su experiencia y su trabajo en esta materia. Como clausura de curso.
P.- ¿Qué preparación académica tiene un Profesor de Religión?
R.- Nieves: Nosotros tenemos que ser diplomados en magisterio. Puesto que pertenecemos al claustro del colegio, somos titulados diplomados en primaria o infantil, igual que el resto de nuestros compañeros; además tenemos una diplomatura específica de Idoneidad Eclesiástica.
P.- ¿Quién acredita esta titulación?
R.- Nieves: Hay algunas escuelas de magisterio, como por ejemplo en la que yo estudié, en Córdoba. Era una escuela de magisterio de la Iglesia, a la vez que hacíamos las asignaturas típicas de cada especialidad, tenías una asignatura que era Teología, durante los tres años de diplomatura y, al terminar, estás diplomada también para dar clase de religión.
La persona que no lo haya cursado, lo puede hacer solicitándolo. Es un curso académico que se puede realizar de diferentes formas, incluso a distancia, en el cual te dirige un profesor del Obispado; en este caso de Ciudad-Real. Te examinas y ya estás cualificada para dar clase en la especialidad de Educación de la Iglesia Católica. Esta titulación es para primaria e infantil, para secundaria se necesitan otros requisitos, como ser licenciadas y hacer el curso correspondiente de Educación Religiosa Católica.
P.- Como la Biblia está escrita de hace mucho tiempo, ¿termináis la titulación y ya no tenéis que prepararos más?
R.- Paquita: Nosotras estamos constantemente haciendo cursos. Todos los años hacemos un curso, las profesoras de religión que pertenecemos al C.P.R. de la provincia de Ciudad Real. Estamos un fin de semana entero con los diferentes ponentes que vienen de las universidades de Madrid y otros lugares. Después continuamos cada grupo en su C.P.R. durante todo el año.
Este año, hemos estado todos los jueves, solemos empezar por octubre o noviembre y continuamos hasta marzo o abril. De esta forma estamos siempre preparados y formados para los temas de actualidad que van surgiendo; como por ejemplo la tan famosa asignatura “Educación para la Ciudadanía”. Nosotras hace tres años, sabíamos ya de lo que iba.
P.- ¿Un profesor de religión puede impartir la asignatura “Educación para la Ciudadanía”?
R.- Nieves: En educación para la ciudadanía, hay contenidos que se contraponen con la educación religiosa, entonces no debe impartir esta asignatura, un profesor de religión. Otra casa muy distinta, es que un profesor católico que imparta Historia o literatura, sí pueda dar esta asignatura y eso sería lo ideal, pero que el mismo profesor de religión imparta educación para la ciudadanía no es posible desde nuestra postura como centro público; en los centros concertados, ahí hay otra serie de directrices, eso sí que me consta que existe.
R.- Tere: Nosotros analizando el texto de Educación para la Ciudadanía que hemos elegido para nuestro centro, no vemos que contenga conceptos que se contradigan con la asignatura de Religión; eso sí, para nosotros constituye una garantía el saber que hemos coincidido con los Salesianos y determinados centros religiosos al elegir el mismo texto. Depende, como en todas las asignaturas, del enfoque que el profesor le dé. Yo es que incluso hasta lo veo conveniente que sea el profesor de Religión.
R.- Paquita: En los horarios están trabajando para acoplar esta asignatura de Educación para la Ciudadanía y darle la misma duración que a la asignatura de Religión, es decir una hora y media a la semana, repartida en dos sesiones.
P.- ¿Los profesores de religión deben ser creyentes?
R.- Isabel: No se les exige ser más coherentes con su fe que a cualquier otro cristiano, pero tampoco menos. Porque si lo que va a enseñar es Religión Católica, su enseñanza debe estar en comunión con la Iglesia y el Magisterio. Los padres no matriculan a sus hijos en Religión para que el profesor reinterprete la fe según sus propios juicios y prejuicios, sino para que les enseñe, desde los medios que le resulten más útiles. Y para eso hace falta que el profesor sea creyente, aunque los alumnos no tienen por qué serlo. Tal como nos decía hace unos días la revista “Alfa y Omega”.
P.- Algunas personas, pueden pensar que la asignatura de Religión es lo mismo que ir a catequesis; por lo que algunos padres no tienen gran preocupación por elegir a la hora de hacer la matrícula para sus hijos, Religión Católica.
R.-Paquita: La catequesis no es nada malo. Introduce en los misterios de la fe y no hace daño. Yo soy catequista y profesora de Religión. La clase de Religión no es una catequesis, sino una especie de Teología para niños y jóvenes, un estudio razonado y razonable de cómo es la fe católica.
El estado tiene la obligación, según recoge la constitución, de ofertar esta asignatura en la enseñanza, y es a los padres a los que les corresponde solicitarla. Si esto no ocurriera así, un día nos podríamos encontrar con que habría desaparecido la asignatura de Religión de los centros de enseñanza. Son los padres y no los profesores, los que tienen el legítimo derecho a solicitarla.
P.- ¿Los padres en Almodóvar solicitan la asignatura de Religión para sus hijos?
R. Tere: En nuestro colegio todos los niños cursan la asignatura de Religión. Tenemos 39 niños en infantil y tenemos niños rumanos, hemos tenido también bosnios y no se nos da el caso de que no quieran dar Religión; después tenemos niños de etnia gitana, estoy hablando de once alumnos, de ellos siete de etnia gitana, tres rumanos y un árabe. También tenemos un alumno, hijo de un agnóstico, que aunque no está bautizado ni asiste a la Iglesia, sus padres no tienen inconveniente en que sus hijos asistan a clase de Religión, porque para ellos es como una formación en valores.
Este padre tiene hecho un estudio comparativo de varias religiones y es muy interesante. Él está educando a sus hijos en libertad y con responsabilidad para que, el día de mañana, puedan elegir, confirmarse o seguir el camino que ellos deseen.
Tan solo tuvimos un alumno cuyos padres dijeron que de ninguna manera su hijo recibiera formación religiosa. Y hubo que ofrecerle una optativa.
R.- Nieves: Tuvimos un caso en infantil, de unos niños cuyos padres dijeron que no y que no. Y los niños cuando me veían siempre me decían “Seño, Seño”. Y ahora están en clase de Religión, porque la alternativa no existe. No hay otra asignatura que les aporte una formación.
P.- ¿Los niños se sienten contentos en clase de Religión?
R.-Tere: Si, muy contentos. Hoy más que nunca se necesita la clase de Religión, sobre todo los más mayorcitos, el tercer ciclo de primaria, y más aún en secundaría. Creo que a través de la asignatura de Religión descubres el verdadero fundamento de la historia de la salvación que es el humanismo cristiano.
Es que tú necesitas a Dios, porque Dios te va a hacer mejor persona y va a hacer que todo lo que está a tu alrededor merezca la pena y que tu seas útil para ti mismo y para los demás.
Descubren otra manera de vivir. Hoy dentro de tanto materialismo, tan egoístas como somos, que sólo vivimos para nosotros, la verdad es que les viene fenomenal.
R.- Nieves: Si están contentos, les gusta y la clase de Religión no es una “María”. Los chicos aunque sea trabajo, tienen que esforzarse. Se tienen que examinar. Que nadie se equivoque, aquí no se viene a pasar un rato divertido. Si les ponemos una película, esa película tiene un cine-forum y si se corta la película es para hacer un interrogante.
Miles de dinámicas podemos hacer con ellos, igual que con el resto de las asignaturas. Es una asignatura igual de seria que las demás. Ni se les come el coco ni nos ponemos ahí a preguntar el catecismo como antiguamente; simplemente se le acercan unos conocimientos y por supuesto el mensaje de que Dios te ama; que a todo niño y a toda persona mayor nos gusta que nos quieran.
Nos guste o no nos guste, es algo que no se puede ocultar.
Tú tienes que saber que tienes un Dios Creador, que te ama, que te salva y que tal como eres te necesita.
R.-Isabel: En mi caso, que doy clase a los mayores, tercero y cuarto de la ESO. Es muy difícil captar su atención. Vemos un tema y luego una película relacionada con el tema y eso les atrae muchísimo; por ejemplo la Pasión, algunos sufrieron, y preguntaban: “¿pero esto de verdad ocurrió?.¿ Esto lo sufrió Jesús realmente por nosotros?”. Lo hemos visto leyéndolo en la Biblia y han dicho, “Anda Isabel, esto es lo que vimos”.
Ahora estamos viendo “Cadena de Favores” y les está despertando mucho interés y muchos interrogantes y dicen: esto se podría hacer. Se les expone el tema y se les motiva a través de las imágenes.
P.- ¿Los niños que nunca han recibido formación religiosa, tienen una carencia, como mínimo cultural con respectos a los niños que asisten a clase de Religión?
R.- Tere: Yo es que creo que, a no ser que des con un padre de una religión muy fundamentalista…
Como profesora de Religión, pienso que estamos ante una gran oportunidad que debemos aprovechar. Debemos aprovechar la estancia de esos niños de religiones diferentes dentro del aula de Religión Católica para, tal como nos está diciendo siempre el Papa: “Ser brazos abiertos”, un camino de apertura; hay muchas maneras de llegar a Dios. De hecho hay temas en Religión Católica que te hablan de otras religiones, te hablan del Islam, de la religión Budista etc. como conocimiento de otras religiones; a raíz de ahí lo que te surgen son muchas actividades y cosas muy interesantes.
Es lo mismo que cuando hablamos de la etnia gitana. Cuando hay gente que no quiere a niños gitanos en las clases compartiendo las aulas con sus hijos. Pues yo creo que es un valor que se está desaprovechando en relación con el proceso de socialización de los niños y de descubrir otros valores. Nadie puede elegir la familia en la que nace.
P.- ¿Qué podríamos hacer con esos alumnos que siendo niños cursaron la asignatura de Religión, pero que al llegar a cursos superiores como bachillerato, no la eligen en su matricula?
R.- Paquita: Cuando terminan el colegio, se les aconseja que continúen con su asignatura de religión, en paralelo con el resto de las materias en las que van a seguir formándose y así lo hace la mayoría, en un principio, pero en mi opinión, es ya en los últimos cursos, en los que van ellos solos a hacer la matrícula, y ya no los acompañan los padres, se dejan tomar esta decisión por el amigo, considerando que esto es un acto de madurez y modernidad. Es aquí donde los padres deberíamos, al darle la importancia que tiene esta asignatura, preguntar a nuestros hijos, por la opción que han elegido.
R.- Tere: Hay situaciones en la vida que te obligan a decidirte. Por ejemplo: El hecho ahora del aborto, antes el divorcio, la droga, la pastilla abortiva, (llamada del día después), las relaciones sexuales prematuras en jóvenes de muy corta edad. Y esta es la realidad en la que viven nuestros jóvenes hoy. ¡Tú tienes que tomar una opción de vida! Y ahí se va a ver la educación que tengas en valores, tu formación religiosa como católico, a la hora de elegir una opción u otra.
No nos vale decir: yo soy católico porque me bautizaron, hice la comunión cuando era pequeño… Sino que en nuestra vida social, nosotros tenemos que definir nuestra postura si somos cristianos.
R.- Isabel: Nosotros tuvimos un debate sobre esto que estamos hablando y que está tan de moda de que las niñas puedan abortar sin conocimiento de sus padres y los chicos no estaban de acuerdo. Ellos tenían como miedo. Aunque los ves así muy chulillos, pero luego reaccionan, ellos dicen: “Isabel cada uno puede hacer lo que quiera, pero yo, yo no lo haría”. Y es ahí donde la fe, sus propios valores afloran ante esta situación.
P.- El niño que sí ha asistido a clase de Religión a lo largo de toda su formación académica, ¿se encuentra más preparado para comprender la pintura, la escultura, música, literatura religiosa y arte en general?
R. Paquita: Trabajo con los niños de infantil y primaría. Tengo la experiencia de cómo ellos se desenvuelven con las láminas de arte que les entrego, de pintura religiosa, escultura, arquitectura, en esas fachadas de catedrales tan didácticas. Ellos conectan con las imágenes y expresan sus conocimientos religiosos a través de lo que le va diciendo la obra. Dudo mucho que semejante grado de comprensión pueda desarrollarlo un alumno que no haya cursado nunca Religión Católica. “No solo ven arte detrás de las imágenes, sino un modelo de valores que quieren vivir.” Tal como decía Juan C. Atienza, comisario de la exposición, “las edades del hombre”.
A los niños les encantan las actividades que realizamos fuera del aula, cuando vamos a visitar nuestras ermitas. Hablamos sobre nuestra historia tan unida a nuestra fe.
P.- Las raíces de las naciones de Europa son raíces cristianas. Tal como nos decía D. Manuel Reyero en el pregón de Semana Santa “la primitiva unificación de Europa fue la fe.”
R.- Isabel : La bandera, que representa La Unión Europea, tiene de fondo el color azul con 12 estrellas en forma de círculo. No es casual que sea el mismo azul el color de la túnica que viste la Virgen; y son 12, las estrellas que coronan su cabeza. Y no es casual, es un símbolo Mariano.
Agradecemos a Teresa, Paquita, Nieves e Isabel su labor que, junto con los padres, tejen esa red que protege, prepara y ayuda en los momentos difíciles a los más vulnerables de nuestra sociedad, los niños, los jóvenes, nuestros hijos.