Al comenzar una nueva etapa, ya sea escolar o catequética, todos deseamos encontrarnos con el compañero perfecto… Unos a «su media naranja», otros al «empollón» que nos ayuda a sacar adelante los exámenes, otros al amigo que siempre está pendiente de lo que nos pasa, otros a la persona que sabe sacar lo mejor de nosotros mismos… En definitiva, al compañero 10, al compañero ejemplar.
Pues bien, amiga, amigo, te presento a ese compañero de pupitre y de recreo, de convivencias y de botellón, de los buenos y de los malos momentos.
Echa un vistazo al siguiente texto, seguramente descubras de qué compañero te estoy hablando…
Ah, y después, ya sabes, pon todo tu esfuerzo y todo tu amor para que esa amistad no se marchite y desaparezca…
El compañero ideal
Joven. No se trata de un problema de años, del DNI. Tu compañero te enseñará a rejuvenecer, todos los días, tu corazón. Los días, los exámenes, los cursos… pasarán, mas la felicidad (en mayúsculas) permanecerá para siempre.
Entregado. A tus problemas, a tus sueños, a tu vida. La verdad es que hay personas que, si no existieran, habría que inventarlas… ¡Tu compañero es una de ellas!
Servicial. ¿O qué pensabas, que tu compañero se iba a subir a la tarima de la clase o de la discoteca para que todo el mundo le aplauda…? No, no, él ya se ha puesto «el mono de currar. ¡Ahora te toca a ti!
Único. Especial. Y tú lo serás en la medida en que incorpores a tu compañero a tu vida. Porque a su lado, aunque para el mundo seas tan sólo una persona, para tu compañero serás, en todo momento, el , su mundo.
Caritativo. Tu compañero sabe mejor que nadie que la caridad no se discute, se practica. A su lado descubrirás que también en tu colegio, en tu parroquia, en tu barrio… hay hermanos tirados en las cunetas… ¡No pases de largo, perderías la pista a tu compañero!
Reconciliador. No vas a ganar a un guardaespaldas que te defienda «a capa y espada.»
Tu compañero te enseñará a ser un joven respetuoso, dialogante, pacífico, tolerante.
Inconformista. No es que tu compañero te vaya a llevar a todas las manifestaciones ni sea el primero «en hacer novillos.»
Eso sí, te enseñará a pensar por ti mismo y a no conformarte con «todo lo que te echen.»
Sobresaliente. ¿Y sabes por qué tu compañero es el mejor? Porque siempre da a los demás lo mejor de sí mismo… ¡Aprende la lección!
Talismán. Ni un colgante ni una pulsera ni una piedra (para ti, preciosa) en el bolsillo…
La Palabra de tu compañero será tu amuleto a partir de ahora.
Ya verás cómo la suerte te sonríe y te conviertes en Buena Noticia para tu gente.
Optimista. La vida y, sobre todo un curso, es demasiado corto para ponerle caras largas… A su lado convertirás los muros en puentes, los obstáculos en vallas que saltar, los problemas en retos, en oportunidades…
Por cierto, ¿ya sabes de qué compañero te estoy hablando?