Invitación a la oración

2008-07-13T05:05:00+00:00

Jesús orandoAtrévete a orar. Es la aventura más fascinante del creyente. Cuando una persona despierta a la fe, lo primero que empieza es a orar. Es que la plegaria está en el corazón de la experiencia religiosa. La oración y la fe van juntas, se acompañan y se nutren entre sí. Si aumenta la fe aumenta también la oración.

La oración es un don, una gracia que hemos de pedir continuamente. Pide el don de la oración, estoy seguro que el Señor te lo dará. La oración es muy frágil, si nos descuidamos se cae al suelo y se hace añicos. ¡Cuántos hombres y mujeres después de muchos años se han cansado de orar. “Señor, enséñanos a orar”. Esta es la súplica de todo creyente. Danos, Señor la perseverancia en la oración.