San Juan de Ávila carta 36
Tomás Lozano Rivas2009-09-12T04:33:00+00:00A unos parientes suyos, casados, en Almodóvar
Así como quien está esperando una cosa nueva, que mucho desea, se alegra cuando ve alguna señal de su deseo, y, aunque sea pequeña, le da no pequeño gozo por la muchedumbre de su deseo, así mi ánima se hinchó de regocijo con la carta de vuestra merced, porque no sé qué barrunté de las palabras que en ella vienen, lo cual, si fuese de hecho, sería un gozo para mí tan grande, que pocos me vendrían que se le igualasen.