Ha fallecido el Padre Amador
Ha fallecido el Padre Amador Gil López, palentino de origen, [...]
Ha fallecido el Padre Amador Gil López, palentino de origen, [...]
Navidad es actualizar, cantar y contar a los demás que una nueva vida nos ha nacido, que el Hijo de Dios se ha manifestado como Luz salvadora, que se nos ha abierto una esperanza total, que se ha vencido el poder de la muerte. ¡Dios se ha hecho hombre!
El nacimiento de Cristo es un hecho histórico: el Hijo eterno de Dios se encarnó llegando a ser tiempo; el que es la Vida tomó carne mortal.
La virgen María fue una persona muy importante en la religión cristiana. A ella se le apareció el ángel Gabriel y le anuncio que sería la madre del Mesías. Ella era una mujer sencilla, con buen corazón. María es el ejemplo de una buena madre, ella le transmitió a su hijo Jesús todo lo que sabía y lo educó adecuadamente.
La virgen María hizo una buena labor con su hijo. Su hijo se sacrificó con nosotros. Ella fue una persona alegre que siempre se le veía contenta aunque estuviera triste por dentro por esto tenemos que seguir su ejemplo y practicar sus buenos comportamientos.
Adrián Manzanares Herrero
(Colegio Maestro Ávila y Sta. Teresa)
Hecho ocurrido en 1892, verdadero y parte de una biografía:
Un señor de unos 70 años viajaba en el tren, teniendo a su lado a un joven universitario que leía su libro de Ciencias. El caballero, a su vez, leía un libro de portada negra. Fue cuando el joven percibió que se trataba de la Biblia y que estaba abierta en el Evangelio de Marcos.
Sin mucha ceremonia, el muchacho interrumpió la lectura del viejo y le preguntó:
- Señor, ¿usted todavía cree en ese libro lleno de fábulas y cuentos?
El tiempo, ese cronómetro
que, impasible, deshace incluso a las estatuas,
que desarbola tus expectativas
y corre sutilmente corrompiendo
la flor de los ensueños terrenales...
En este artículo, me gustaría agradecer y felicitar la labor que sigue realizando ese grupo de amigos que, a pesar de la dificultad de no tener a su querido maestro Pascual, siguen reunidos manteniendo esa bonita tradición que tenemos en Almodóvar: la preparación de la Navidad con sus Misas de la Virgen.
Estoy totalmente convencido que mi padre estará muy orgulloso de ver cómo el esfuerzo y la ilusión que él nos enseñó, sigue estando presente en el grupo.
Acabo de ver la película “Bella” por segunda vez. Me ha dejado un sabor de tranquilidad, paz, serenidad y belleza.
Estamos acostumbrados a otros modelos que nos presenta el cine. El hispano es el que está metido en las drogas, el pobre hombre que no tiene donde caerse muerto, el ilegal que trata de esconderse de la policía, la persona irresponsable en el trabajo, el ladronzuelo que trata de llevarse cosas cuando menos lo esperas, el mujeriego que se va detrás de cualquiera…
Queridos amigos/as de Almodóvar: Aquí mando algo de mis primeras impresiones por estas tierras ecuatorianas.
Estos días navideños siempre son buenos para que los que estamos lejos físicamente nos hagamos cercanos y no hay nada mejor que estos medios tecnológicos, rápidos y seguros.
Hace dos meses que llegué a Ecuador y un mes que me encuentro en mi nueva misión que se encuentra en la costa del pacífico.
Hace unos días, alguien me dijo que dibujara un árbol para que, a través de él, pudiera decirme aspectos de mi personalidad. Una especie de análisis psicológico a partir de un dibujo, en este caso de un árbol.
Lo hice. Dibujé un árbol. En realidad, antes de hacer el definitivo, dibujé cuatro árboles, pero ninguno parecía decir aquello que mi interior pujaba por expresar en aquellos trazos que me empeñaba en dibujar.
En el nº 215 “Iglesia de Almodóvar” - Noviembre 2008 -, aparece publicado, como colaboración un artículo titulado “¿Quien negocia con el llanto silencioso de los niños? ” Firmado por Dª Natividad Cepeda.
No se pretende con estas líneas entrar en ningún debate que, seguramente, resultaría estéril.
Queda claro la opinión que le merece la Administración de Justicia a la persona que firma la referida colaboración cuando dice: “las explicaciones dadas por los empleados de los Juzgados no nos han convencido”; y más adelante añade: . . . “el prestigio no lo da un título universitario, sino el buen crédito que debe conferir a la justicia en cualquier sentencia”.